viernes, 29 de noviembre de 2013

 Educación Emocional

La educación emocional es una innovación en el ámbito educativo que se encarga de responder a las necesidades sociales que no se atiendes el las materias e asignaturas académicas habituales.
Su base está en el concepto de emoción, teorías sobre las emociones, inteligencia emocional, movimientos de renovación pedagógica, la psicología y las habilidades sociales, entre otros.Su objetivo principal es el desarrollo positivo de ciertas competencias emocionales, como la conciencia, la regulación de las emociones y el bienestar.
 



La práctica de la educación emocional implica diseñar una serie de programas fundamentados básicamente en un marco teórico, que para llevarlos a cabo y al ámbito de la práctica se necesita contar con profesores debidamente cualificados y preparados. Y para apoyar la labor del profesorado, se necesitan materiales curriculares, y para evaluar programas se necesitan instrumentos de recogida de datos.


En la siguiente imagen, podemos observar un pequeño mapa conceptual en forma de círculos, con los ejes que controla principalmente la inteligencia emocional, un concepto dentro de la educación emocional.

Los psicólogos y los pedagogos dentro de esta ámbito, le dan mucha importancia a la educación emocional infantil. Esta, trata de explicar el por qué hay niños que se adaptan mejor que otros a diferentes cambios y ámbitos por los que pasa durante su infancia. Como por ejemplo: dejar el chupete, dar los primeros pasos, el primer sía de cole, dormir solo.... ect.


La educación emocional influye mucho en los niños, sobretodo en los primeros años de vida, ya que tienen una facilidad extraordinaria para aprender y adquirir las herramientas necesarias que posteriormente le servirán para afrontar todos los retos que les va a plantear la vida. Por ellos es muy importante trabajar con los niños en varios aspectos, sobretodo en los más importantes como la empatía, autoestima, habilidades sociales y el autoconocimiento. Para fortalecer estos aspectos, los padres y educadores, en casa y en las ecuelas, deben favorecer la comunicación oral y desarrollar el lenguaje emocional dándoles la oportunidad de hablar sobre sus emociones y libertad para expresarlas.
Con esta serie de ayudas, el niño tenderá a autoregular sus emociones y descartar aquellas que no le aporten nada bueno, así como seleccionar las buenas.
Melanie Gasulla Donat.





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